Misión Unión - Orden Oscura

Allen suspiro, mirando a Timcampy volar sober su cabeza mientras él trataba de conciliar el sueño, pero sin éxito. Tenía muchas cosas en la mente, demasiadas como para dormir tranquilo y rejalado. Además, su estómago lo estaba animando a bajar a la cocina, a pesar que ya habia comido hace una hora.

El peliblanco se sentó en el borde. No conseguiría nada quedándose recostado. Además, aún queria unas respuestas... Su mente volvió a su amigo pelirrojo y Allen frunció el ceño, pero al tener el rostro infantil, este se transformó en un hermoso puchero. Lavi era su amigo, pero eso no evitó que al principio dudara de las acciones del pelirrojo. Sabía que el aprendiz sentía algo por Tyki Mikk, y aunque ahora lo apoyara en cierta forma... Tyki Mikk era el Noé que trató de matarlo y destruir su inocencia. Sin embargo, no podía juzgar cuando su amigo suspiraba por el moreno cada día, y esto aumentaba conforme los días pasaban, ya que la orden vigilaba al pelirrojo. "Al igual que a mi...." pensó el peliblanco.

Abrio la puerta y salió del cuarto, en busca de Lavi. Por el momento, era lo mejor. Cuando se iba acercando a su destino (a donde sospechaba que estaba su amigo=, Allen no pudo evitar fijarse en una sombra muy conocida para él. Esperen! Era... No podía ser! El demonio! Y estaba con la pober de Miranda! Tenía que salvarla de las garras de ese mujeriego... aunque también tenía que salvarse él. Se tranquilizo por unos segundos al ver a Lavi dormido. Al parecer Miranda tuvo la misma idea que é.

Las mejillas del peliblanco se tiñeron de un ligero color rojo cuando su maestro soltó ese comentario. ¡Que verguenza! Realmente, Cross Mariam no había cambiado, todo lo contrario, al parecer, su frescura había aumentado con el paso de los años. Allen abrió la boca para contestar, pero justo en ese instante, la voz del pelirrojo lo distrajo. Sonrió al ver a Lavi, pero también noto su mirada... sus ojos desprendían tristeza, y Allen sabía muy bien que era por culpa de ese Noe.

-Lavi!- llamó el peliblanco feliz, no quería que su amigo se sintiera peor si lo veía sin ánimos.- ¿Te despertamos? Algunas personas, siempre hacen ruido- ese ultimo comentario, lo dijo mirando al otro pelirrojo.

Kanda se encontraba tras la puerta de su habitacion, esperando a que se calmara el alboroto que se habia armado afuera, pero por mas que trataba no podia conseguir de nuevo el sueño. Asi que decidio tomar rumbo, hacia donde provenia el escandalo.
"che, ¿Que acaso no se puede dormir en este lugar?" se dijo para sus adentros.
El peliazul habia cambiado a un aspecto mucho mas frio aun, desde que se entero que Lavi compartia momentos intimos con ese Noe, que a decir verdad no le simpatizaba nada la idea. Para Kanda, Tyki siempre sera de lo peor y no habia nada que lo cambiara de parecer, ademas era uno de sus enemigos y no le parecia que Lavi estuviera con el enemigo.

Finalmente llego al punto donde estaba el alboroto, y noto que la cara de Lavi era muy distinta, aquel chico que siempre le hacia bromas o le llamaba por su nombre "Yuu", habia desaparecido por completo, frente a el estaba un Lavi desanimado y triste, pero no solo por eso cambiaria de parecer, Kanda era un hombre de palabra y si el daba su palabra, esta se cumplia.

-Se puede saber a que se debe todo este escandalo?......Moyashi?- Primero lanzo la pregunta pluralmente, pero al toparse con la cara del alvino lo sito solo a el.

Era lo que faltaba... Ahora el estupido Bakanda venia a molestarlo. Allen suspiro y se preparo para correr si veia el filo de Mugen.

-Larga historia Bakanda.... Lavi ha estado deprimido por Tyki Mikk, Miranda lo ayudo y Cross no deja de coquetear- Allen lo dijo tan facilmente, que parecia historia de todos los dias.

-Que mas podria pasar?-